María Jesús Devolx López – Coach
El año pasado, todavía muy metidos en la pandemia, empezar un nuevo año no me afectó mucho.
Este año, las sensaciones son diferentes. Se abren oportunidades pero vienen acompañadas del desafío de deshacerse de las telarañas que muchos meses de pandemia nos han dejado pegadas.
En este contexto, al llegar el final de las vacaciones de Navidad, se me vinieron a la mente dos pensamientos: ¡Se acabaron las vacaciones! 🥳 y ¿Se acabaron las vacaciones? 😲
Una parte de mí ansiaba retomar el silencio, la tranquilidad de mi rutina. De alguna forma mi libertad, mi independencia.
No obstante, abrir mi agenda me produjo una sensación de vacío y responsabilidad. A fin de cuentas, de mí depende llenarla y hacerlo bien.
Boli en mano, me puse a incluir las citas médicas, las vacaciones escolares, eventos y compromisos concertados el año pasado. Bien, y ahora…
¿Qué quiero para mí en 2022? ¿Con qué tengo que llenar mi agenda para lograrlo?
Definir en qué queremos invertir nuestro tiempo y energía cada día no es tarea sencilla. Especialmente cuando, aparentemente tenemos montañas de tiempo libre, pero los días se nos van volando. Aún menos fácil, cuando llevamos casi dos años viviendo con miedo a vivir.
Realmente, de nosotros depende tener la agenda llena de «cosas que nos ocupen», o inscribir en ella «experiencias que nos llenen». Nosotros decidimos el espacio que otorgamos a cada categoría. Para los que nos desenvolvemos en el mundo de la expatriación, nuestra gestión del tiempo tiene un gran impacto.
En expatriación cambiamos periódicamente de puesto. Los años en cada país son intensos (para lo bueno y para lo malo 😬) y limitados. Somos conscientes de que nos ofrece experiencias y oportunidades únicas, generalmente irrepetibles y con fecha de caducidad. Y aún así, a lo largo de mis 20 años de expatriación he vivido momentos en los que:
En estos casos, mi agenda podía estar llena, pero no me llenaba. ¿Es tu caso actualmente? ¿Te lo has planteado?
Tener claridad de lo que queremos en cada destino nos motiva a organizar conscientemente nuestro tiempo. Incluir en nuestros programas actividades que nos proporcionen emociones positivas, con las que nos sintamos comprometidos y realizados, que nos permitan crear y mantener relaciones interpersonales y que sean relevantes.
Tal vez tu agenda ya es así. ¡Enhorabuena! Pero, quizás no. A lo mejor te gustaría tener más de alguno de estos elementos en tu vida pero no sabes cómo lograrlo, o cuál priorizar.
Te animo a que le des un par de vueltas.
Si quieres, lo hacemos juntas. Estaría encantada. Ponte en contacto conmigo y SIN NINGÚN COMPROMISO, vemos si somos buenos compañeros de camino. Y si quieres leer mis artículos sobre la vida de expatriación, te invito a que te registres. No te preocupes, no te voy a bombardear con emails, solo avisos de que hay un nuevo artículo listo.
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